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La Presidencia Federal de Izquierda Unida ha aprobado este viernes expulsar de la formación a los actuales portavoces del partido en la Asamblea y el Ayuntamiento de Madrid, Gregorio Gordo y Ángel Pérez, por una "falta muy grave" al incumplir las resoluciones que les exigían abandonar las portavocías por sus responsabilidades políticas en las irregularidades de Caja Madrid-Bankia.
La votación ha contado con 31 votos a favor, ninguno en contra y dos abstenciones en un órgano compuesto por 70 miembros, por lo que queda ratificado el expediente disciplinario que se les abrió a ambos portavoces.
Sin embargo, los representantes de Izquierda Abierta, el partido de Gaspar Llamazares integrado en IU, no han querido participar en la votación "por defectos graves en el procedimiento", explican fuentes de la formación. Entre esos "defectos" argumentan que los expulsados no han comparecido ni han tenido representación , al tiempo que la decisión "deja impune a la Ejecutiva que en 2009 nombró a Moral Santín (exvicepresidente de Caja Madrid y representante de IU en el consejo de la caja, imputado por varios delitos de corrupción). "Se parece más a un juicio de honor militar que a un juicio de ley", critican.
Del mismo modo, los representantes de la actual dirección colegiada de IU-Comunidad de Madrid tampoco han querido participar y han abandonado la reunión. En total han sido 12 los asistentes que no han votado.
El que sí ha votado a favor de la expulsión ha sido el coordinador federal de IU, Cayo Lara, que no ha participado en las intervenciones sobre el expediente, según apuntan fuentes presentes en la reunión.
Sin efectos prácticos
La decisión, en realidad, no tiene ningún efecto práctico más allá de que dejan de ser militantes de Izquierda Unida, que no de Izquierda Unida-Comunidad de Madrid. Son los órganos de IU-CM los que tienen potestad para cesarles de sus actuales cargos, y sus representantes ya han adelantado que no lo van a hacer. El propio Pérez ya adelantó que llevará a los tribunales esta decisión.
El expediente, cuya instrucción se encargó a Henar Moreno y a Amanda Meyer, fue comunicado el mismo día de su inicio a los interesados y en su texto original se especificaba que se abría “por falta muy grave contemplada en el artículo 31, apartado 4 punto q”, de los Estatutos federales, apuntando particularmente a ‘la actuación en contra de los acuerdos, decisiones o resoluciones expresamente adoptados por los órganos de la organización en el marco de sus competencias con consecuencias negativas para IU", explica la coalición en un comunicado.
La última resolución de la Presidencia Federal, el pasado 30 de enero, incidía en que consideraba “inaceptable la actuación de los compañeros actuales portavoces de los Grupos de la Asamblea y Ayuntamiento de Madrid que no acatan el contenido de la Resolución del Consejo Político Federal y, ante esta circunstancia, que es un grave incumplimiento, se acuerda su desautorización política y aprobar que este órgano, en el ejercicio de sus competencias inicie el correspondiente expediente, para lo que el coordinador de la Presidencia mandatará a un miembro de la Presidencia para que desarrolle estatutariamente el citado expediente”.
La decisión puede ser un paso hacia la resolución del conflicto interno que vive la federación madrileña de IU, aunque llega tarde, a juzgar por el abandono de la que era su candidata a la Asamblea de Madrid, Tania Sánchez. Esta dilación también ha provocado que una parte importante de IU-CM no reconozca a su actual dirección colegiada, en manos del sector de Pérez y Gordo desde la dimisión del coordinador regional Eddy Sánchez.
Fuente: Público
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