Los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Cándido Méndez, tras denunciar este sábado que la reforma laboral aprobada por el Gobierno es "radical" y está escrita "bajo la pluma de CEOE y Fedea", han anunciado la puesta en marcha de una campaña de movilizaciones generales, creciente y sostenida, que comenzará el próximo 19 de febrero. Al mismo tiempo, han dejado abierta la puerta de una huelga general.
Según ha explicado en rueda de prensa en Madrid el secretario general de Comisiones Obreras, Ignacio Fernández Toxo, a la que también asistió el líder de UGT, Cándido Méndez, representantes sindicales van a ir a todas las empresas a expresar el rechazo frontal de ambas centrales de trabajadores a la reforma.
Además, Toxo ha recordado que el próximo día 29 hay convocada una movilización europea contra los ajustes económicos aplicados en varios países de la Unión Europea, que ambos sindicatos también
secundarán.
Respecto a la posibilidad de convocar movilizaciones mayores, como podría ser una huelga general, han supeditado la convocatoria al apoyo de la sociedad y a que el Gobierno cambie en la tramitación de la norma lo aprobado.
Críticas a la reforma laboral
Los líderes sindicales afirmaron que la reforma supone "el desmantelamiento progresivo del derecho del trabajo en nuestro país".
"No se justifica ni por el contexto, ni por las formas, ni en sus contenidos, ni por los objetivos que dice el Gobierno que persigue", agregó Toxo.
Además, el dirigente de CCOO afirmó que esta reforma no es que no vaya a crear empleo, sino que ni siquiera va a servir para frenar la sangría de destrucción de puestos de trabajo. Es más, "puede acelerar la destrucción de empleo", aseveró.
Reforma radical
Para Toxo, la reforma es radical y pretende desmantelar el derecho laboral, y ha advertido de que generará más destrucción de empleo y más conflictos en las empresas, al tiempo que ha dicho que es la que han dictado al Gobierno los organismos internacionales, la patronal CEOE, Funcas (Fundación de Cajas de Ahorros) y Fedea (Fundación de Estudios de Economía Aplicada).
Según Méndez, el Gobierno la ha aprobado porque actúa como si España fuera un país intervenido, al igual que Portugal. En su opinión, el Ejecutivo de Mariano Rajoy actúa "sin autonomía y ha asumido la lógica de que el país está intervenido", ha insistido.
De la reforma también ha dicho que es "inútil" y "desequilibrada".
Fuente: El Economista
0 comentarios:
Publicar un comentario
Comente con respeto.