Por un momento se produjo un incómodo silencio. Fue cuando un periodista quiso saber si el Gobierno tenía intención de mandar al Parlamento durante esta legislatura una ley de la Corona que de alguna forma pudiese regular las competencias y atribuciones de la familia real o un
estatuto de sus diferentes miembros.
La vicepresidenta y portavoz aseguró que era un asunto que le correspondía "a la primera de las instituciones del Estado" y que, por tanto, si alguien debía ocuparse de ello era la propia Corona. Además recordó que no era un tema que llevara su partido en el programa electoral con el que se presentó a las elecciones del pasado 20-N.
"Esta cuestión no está en este momento encima de la mesa y no ha estado en el Consejo de Ministros. Estas cosas hay que hacerlas como se deben hacer y si se deben hacer", concluyó Sáenz de Santamaría, mientras incidía en que el Ejecutivo se iba a centrar en la crisis económica y en la lucha contra el paro.
La mano derecha de Rajoy despejó así cualquier duda sobre la actuación del Ejecutivo conservador tras saltar el escándalo de la investigación judicial sobre el duque de Palma, Iñaki Urdangarin, por supuestas irregularidades en su gestión del Instituto Nóos. La investigación del juez de Palma José Castro apunta a que Urdangarin facturó a través de esta ONG y su conglomerado de empresas más de 16 millones de euros. Casi el 40% de los ingresos totales salieron del erario público.
La ingeniería financiera de la trama le permitió no sólo lucrarse con dinero público, sino pagar menos impuestos, según la investigación. Todas las fuentes jurídicas coinciden en que será citado a declarar como imputado en breve.
Prudencia
Tanto conservadores como socialistas han coincidido en señalar en estos días que desde la Casa Real se ha actuado "con prudencia" al apartar al esposo de la infanta Cristina de la actividad oficial porque sus actividades privadas no debían interferir en las de la Corona.
Después de que el duque de Palma pidiera a través de un comunicado que se desvinculara a la Casa Real de sus negocios, el pasado 12 de diciembre la Zarzuela decidió divulgar que Urdangarin quedaba apartado de los actos oficiales de Zarzuela tras calificar su conducta de "no ejemplar".
Fuente: Público
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