No sólo el crédito se contrae en España como consecuencia de la crisis. También los depósitos encogen su saldo afectados por varios factores asociados al entorno económico. Según los datos del Banco de España, recogidos en la memoria de supervisión bancaria, los depósitos a la clientela de la banca española, en lo que se refiere a su negocio doméstico, disminuyen algo más del 6% a cierre de 2011, lo que supone un descenso de unos 97.300 millones de euros.
Es el sector no residente el que retira, porcentualmente, más volumen de depósitos durante el año pasado. Así, si a cierre de 2010, el saldo era de 108.494 millones, un año después mengua en 27.813 millones, para quedar en unos 80.500 millones de euros. Esto supone que desaparece uno de cada cuatro euros depositados en las entidades financieras españolas por personas o sociedades no residentes en España.
El descenso en el sector privado residente es mucho más moderado, si bien en números absolutos supera a la retirada efectuada por los extranjeros, ya que sus depósitos disminuyeron en unos 60.000 millones durante el año pasado. Este descenso supone una reducción del 4,4 por ciento.
Según explicaba el supervisor en su último informe de estabilidad financiera, en el que apreciaba cómo se había acelerado el descenso de depósitos durante el segundo semestre del año pasado, la disminución está asociada "al incremento de las tensiones financieras asociadas a la crisis soberana de la zona euro", más intensas en España.
Estas tensiones del año pasado, tal y como se reproducen actualmente, hizo subir la rentabilidad de las letras del Tesoro, que superaron la de los depósitos y, por tanto, hicieron que éstos perdieran atractivo a favor de la deuda pública española a corto plazo.
A su vez, las entidades, tras la entrada en vigor de la normativa que castiga con contribuciones extra al FGD (Fondo de Garantía de Depósitos) a los que comercialicen imposiciones a plazo con interés alto, empujó a la banca a poner en el mercado otros productos con el que continuar su lucha por captar el ahorro de empresas y familias.
Los pagarés, que no están sujetos a esta limitación, por no estar garantizados por el FGD, fue el producto que más intensamente comercializó la banca española y que explica buena parte del descenso del saldo de los depósitos.
Por último, el Banco de España, señala que un 15% de la bajada de los depósitos hay que atribuirla, y este factor sí esta ligado a la desconfianza en la economía española, a la inversión en estos mismos productos, pero en el extranjero, un movimiento que estarían realizando fundamentalmente empresas.
Según los datos recogidos en la memoria de supervisión, la evolución negativa de los depósitos se produce en el negocio doméstico de las entidades, algo acorde con el hecho de que son los intereses de la banca en el extranjero la que contribuye a sostener las cuentas de los grupos más diversificados. Así, en el negocio en España, las imposiciones caen un 6,2 por ciento, pero la cifra que registra el balance consolidado se reduce a sólo un 2,4 por ciento.
Más caída en cajas del Frob
Por otro lado, la reducción de los depósitos no es de la misma intensidad en todas las entidades. Así, el Banco de España afirma que en las entidades controladas por el Frob en 2011 (la CAM, Banco de Valencia, Unnim, CatalunyaCaixa y NovaGalicia), la caída de los depósitos es del 9%, un 50% más que la media, lo que podría indicar una pérdida de clientela tras el control público.
El crédito, por su parte, también disminuye en 2011, por tercer año consecutivo en su negocio doméstico. El año pasado disminuyó en un 3,5%, pero con una muy desigual distribución por sectores. Así las Administraciones Públicas, recibieron un 10,5% más de créditos respecto al año anterior, unos 89.000 millones de euros.
Es el único sector que ve aumentar esta partida, ya que el sector privado residente registró descensos del crédito del 4,2%. Dentro de éste, el crédito comercial experimentó la mayor contracción, del 7,9%, mientras que el que tiene un mayor peso en el balance, el que lleva aparejado garantías hipotecarias, bajó el 6% en 2011, es decir, en unos 60.000 millones de euros.
Las previsiones para este año, tanto en depósitos como en créditos, es de continuar con la disminución. El Banco de España da cuenta de que en los primeros meses de 2012 la tendencia no sólo se mantiene, sino que se incrementa.
Según los expertos, ni las reformas financieras ni el rescate a la banca, por la que puede recibir hasta un máximo de 100.000 millones de euros de Bruselas no cambiará la situación, sino que contribuirá a mantenerla.
El presidente del Popular, Ángel Ron, afirmó recientemente que obligar a los bancos a provisionar 'por si acaso' activos sanos, es contraproducente para los mercados y contradictorio con el objetivo de aumentar el crédito a pymes y familias.
También el consejero delegado del Sabadell, Jaume Guardiola, piensa que los mayores requerimientos no contribuirán a aumentar el crédito, sino a contraerlo. La razón es que si hay que aumentar las provisiones, se castigarán las reservas, lo que afecta al capital. Algo que sólo se puede recuperar con una reducción de los créditos.
Fuente: El economista
lunes, 18 de junio de 2012
Los extranjeros retiran de la banca española el 25% de sus depósitos
18:00
Sin comentarios
0 comentarios:
Publicar un comentario
Comente con respeto.